Ventajas y desventajas de las sillas de comedor blancas

No hay duda de que el blanco es uno de los colores más usados en decoración. Y no por casualidad. En este artículo te contamos brevemente cuáles son las ventajas de las sillas de comedor blancas, así como algunas de sus desventajas. Aunque por suerte, estas últimas suelen tener solución.

Ventajas de las sillas de comedor blancas

Una de las principales ventajas de usar este color en un comedor es la elegancia que aporta. No solo en las sillas, sino también en el resto de elementos de la decoración, como la mesa, la lámpara, el sofá… Obviamente, no todo tiene que ser de este color, pero si logras dar con una combinación que no sea monótona, la elegancia la tienes asegurada, sobre todo con modelos ya de por sí distinguidos, como el Litau Piel Real.

La tarea de combinar no será precisamente difícil, pues se trata de uno de los colores comodín: queda bien con todo. Y no solo con el resto de muebles, sino también con accesorios como manteles o servilletas, o incluso con elementos que formen parte de las propias sillas de comedor blancas. El modelo Sabana es un buen ejemplo de cómo una estructura marrón se asocia bien a un cojín blanco.

Otro rasgo inseparable del blanco es la luminosidad. Unas sillas de comedor en este color dan luz a la mesa, especialmente si se encuentra cerca de una ventana, que ayudará a situar el foco de atención en este espacio.

Desventajas de las sillas de comedor blancas

También hay algunas desventajas, aunque tienen menos peso en el conjunto de la decisión. Por ejemplo, determinadas manchas son más difíciles de eliminar sobre las sillas de comedor blancas. Pero esto no es un problema si elegimos modelos de piel de alta calidad o de madera con acabado cromado, como las Carlo.

Otro de los inconvenientes que se le suele atribuir al blanco es que envejece más rápido, que pierde sus propiedades luminosas antes que otros colores. Sin embargo, esto también se puede evitar con un mantenimiento y un tratamiento más cuidado y frecuente.