Con el verano llegan las vacaciones y no hay nada más placentero que echarse sobre unas tumbonas de piscina para descansar y relajarse. Las altas temperaturas invitan y pegarse un baño. Tantas son las ganas de refrescarse, que hay quienes agudizan su ingenio y crean su propia piscina en el balcón, aunque sea una idea temeraria.
Si tienes la oportunidad de chapotear este verano en una piscina (que sea segura) un elemento imprescindible para después del baño es la tumbona de piscina. Si estás pensando en hacerte con una, deberás tener en cuenta algunos aspectos para escoger las tumbonas de piscina más adecuadas. Existe una gran variedad de modelos diferentes y escoger el más adecuado no siempre es sencillo. Aunque tengas en mente la clase de tumbona para piscina que quieres, es recomendable seguir la opinión de expertos en mobiliario de exterior para que optes por el modelo que mejor se ajuste a tus necesidades.
En HOMY Decoración queremos facilitarte esa tarea y te ofrecemos una serie de consejos y recomendaciones para que hagas la elección correcta. Después tan sólo tendrás que preocuparte de disfrutarla y relajarse.
¿Qué uso vas a hacer de tu tumbona de piscina?
¿Vas a utilizarla para uso exclusivo en la piscina o pretendes darle más usos? Antes de decirte por un modelo, tendrás que responderte a esta pregunta.
Si vas a utilizarla en tu patio o terraza, es posible que te interese una tumbona de jardín más vistosa y que forme parte de la decoración de ese espacio, es decir, que se adapte a los muebles que ya tienes o que responda al estilo más te guste: tradicional, moderno… las posibilidades y estilos son infinitos.
Suelen ser tumbonas para piscina más grandes en dimensiones, acolchadas y realmente cómodas. El ejemplo perfecto puede ser nuestro modelo PARMA. Su respaldo, reclinable en varias posiciones, y su gran acolchado la hacen que sea perfecta para estar muchas horas en ella. Lujo asegurado a un precio inmejorable.
Si necesitas darle más usos, moverla constantemente para ir a una piscina pública o a la playa, la solución pasa por buscar modelos plegables más pequeños y ligeros, que permiten recogerla y transportarla cómodamente.
Tumbonas para piscina según su estructura
Las tumbonas son las mejores aliadas para las tardes de playa o piscina durante el verano. Hay una gran variedad de tipos y estructuras.
Existen tumbonas para piscina fijas o reclinables. Hay modelos fijos o que tienen muy poca variación de ángulo, aunque la mayoría de las tumbonas son reclinables, hay algunos. Es recomendable que el respaldo sea reclinable para que puedas ajustar la posición según vayas a leer, a tomar algo o a tumbarte al sol. Recuerda que la comodidad es el factor más importante a tener en cuenta puesto que es un elemento que vas a utilizar para relajarte.
También podemos encontrar en el mercado modelos con o sin parasol. La mayoría de tumbonas no lo incluye, pero para las personas especialmente sensibles a la luz solar este accesorio puede ser una solución muy práctica que proteja del sol, ya que aporta sombra justo en la zona del rostro. De esta manera evitas la luz directa en la cara y con esa pequeña sombra ganas algo de frescor.
Podrás ver también modelos de tumbonas que en uno de los extremos incluyan un par de ruedas para facilitar su transporte. Sin duda es un elemento que te servirá de gran ayuda, sobre todo si tienes dificultades para cargar con objetos pesados. Gracias a esas ruedas podrás trasladarla de un punto a otro con la máxima facilidad.
Materiales de las tumbonas para piscina
También deberías tener en cuenta los materiales con los que se haya fabricado. Aunque en ocasiones busquemos tumbonas de piscina baratas, quizá los materiales no sean los más adecuados para usar en zonas húmedas como la playa o la piscina. Tendrás que optar por modelos que resistan bien el agua, con materiales antioxidantes sobre todo si la vas a usar en la playa ya que el mar aumenta el nivel de humedad en el entorno y podría acabar por estropearla.
Podemos encontrar diferentes estilos y también diferentes materiales con los que se fabrican tumbonas. Suelen estar fabricadas con componentes sólidos, principalmente en su estructura, como los siguientes:
Aluminio o acero: son materiales especialmente robustos y resistentes. Si además están tratados con productos antioxidantes para protegerlos de la humedad, podrán resistir y aguantar perfectamente su uso al aire libre.
Plástico: aunque no son tan robustas como las metálicas, son igualmente resistentes si se hace un uso adecuado de ellas. Son resistentes al agua, no les afecta para nada la humedad y aguantan bien los cambios de temperatura.
Poly rattan: en el mismo sentido que las de plástico, este material fabricado con polietileno para representar una alternativa al ratán natural, imitando el diseño de éste pero con las ventajas del material plástico.
Madera: siempre agradable y elegante, la madera requiere de ciertos tratamientos y cuidados para que se mantenga siempre en perfectas condiciones de uso.
Muchas de estas tumbonas pueden ir acolchadas con colchonetas o con cojines, siempre recomendables para ganar en confort. Nuestro consejo es que estén tapizadas con textil sintético que vaya recubierto de una fina capa de PVC, puesto que este material es resistente a la intemperie con sus cambios de temperatura y humedad.
Ya te hemos presentado e informado sobre los distintos elementos que deberías tener en cuenta a la hora de escoger tu tumbona. Tras buscar y comparar, elige el modelo que mejor se ajusta a tus necesidades. Después tan sólo tendrás que encargarte de disfrutarla y relajarte cuando estés tumbado sobre ella.
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